domingo, 2 de abril de 2017

¡...Y siempre lo serán! ♫ ¡Y siempre lo serán!


Ayer celebramos mis 30 por adelantado y los 33 de Chu con retraso. Soplamos velas que ponían 3·0·3. “Ni Elrond tiene tantos años”, comentó Matmut. Los Albus se partieron de risa con el chiste. Patput entonaba que éramos unos chicos excelentes y que siempre lo seríamos. Y esperamos que podamos juntarnos así muchas más veces, por suerte esta vez también pudo acompañarnos Maruti.

Te estarás preguntando qué hacía yo soplando velas en la víspera de tu cumpleaños, qué clase de nombres son esos y… quiénes son todos esos.

Para responder a tu primera pregunta, como tú, soy mucho de celebrar con cualquier excusa y además hacerlo de forma que podamos reunirnos cuantos más mejor. Lo de los motes… ya sabes que somos muy de bautizar. Y lo otro, ahora te cuento.

Todo ha cambiado mucho desde que no estás. Bueno, algunas cosas siguen su orden natural: nos hemos metido en varios líos de los buenos, de vez en cuando nos subimos a un avión para no perder la costumbre, la cocina sigue siendo la habitación preferida de todos, hemos hecho un par de mudanzas, a la abuela y a mí nos da la risa hablando por teléfono y al final tenemos que colgar. Esas cosas.

Pero desde que faltas la familia ha crecido. Estarías feliz de conocerles, quererles, mimarles como hacías con todos. ¿Sabes que eres tío-abuelo X3? Times three, oh yeah. Ya les llamaré yo cada cumpleaños de tu parte.

Pues lo que te iba contando (que a veces me enrollo como las Delgado).

Chu es corto para chúper-guapo, y sí, el mote es una de mis tontunas pero es la persona a la que he decidido querer para siempre, como tú a mamá y ella a ti. Y vienen con él las últimas aportaciones a la familia, que por cierto, formalizamos el próximo 9 de septiembre. No te había dicho nada porque sé que estarás liado, pero bueno.

El caso es que la familia crece, y me encanta ver cómo crece también alrededor de nosotros dos.


Siento muchísimo que te estés perdiendo todo esto, porque serías el más disfrutón. Siento que no les hayas conocido y que no te hayan conocido a ti.

Sé que probablemente la vida contigo no habría sido diferente, quizá sí… pero siempre habría sido mejor. Así que en cualquier silencio y sobre todo barullo, en tranquila soledad o así de bien acompañada, aposta o sin querer, sin ningún motivo y con todas las razones, siempre te tengo ahí. Haciéndome mejor. Haciéndonos mejores. Unos chicos excelentes...

Valeu, Pai. Parabéns. Até máis.