Ayer celebramos mis 30 por adelantado y los 33 de Chu con
retraso. Soplamos velas que ponían 3·0·3. “Ni Elrond tiene tantos años”,
comentó Matmut. Los Albus se partieron de risa con el chiste. Patput entonaba
que éramos unos chicos excelentes y que siempre lo seríamos. Y esperamos que
podamos juntarnos así muchas más veces, por suerte esta vez también pudo
acompañarnos Maruti.
Te estarás preguntando qué hacía yo soplando velas en la
víspera de tu cumpleaños, qué clase de nombres son esos y… quiénes son todos
esos.
Para responder a tu primera pregunta, como tú, soy mucho de
celebrar con cualquier excusa y además hacerlo de forma que podamos reunirnos
cuantos más mejor. Lo de los motes… ya sabes que somos muy de bautizar. Y lo
otro, ahora te cuento.
Todo ha cambiado mucho desde que no estás. Bueno, algunas
cosas siguen su orden natural: nos hemos metido en varios líos de los buenos,
de vez en cuando nos subimos a un avión para no perder la costumbre, la cocina
sigue siendo la habitación preferida de todos, hemos hecho un par de mudanzas, a
la abuela y a mí nos da la risa hablando por teléfono y al final tenemos que
colgar. Esas cosas.
Pero desde que faltas la familia ha crecido. Estarías feliz
de conocerles, quererles, mimarles como hacías con todos. ¿Sabes que eres
tío-abuelo X3? Times three, oh yeah. Ya
les llamaré yo cada cumpleaños de tu parte.
Pues lo que te iba contando (que a veces me enrollo como las
Delgado).
Chu es corto para chúper-guapo,
y sí, el mote es una de mis tontunas pero es la persona a la que he decidido
querer para siempre, como tú a mamá y ella a ti. Y vienen con él las últimas
aportaciones a la familia, que por cierto, formalizamos el próximo 9 de
septiembre. No te había dicho nada porque sé que estarás liado, pero bueno.
El caso es que la familia crece, y me encanta ver cómo crece
también alrededor de nosotros dos.
Siento muchísimo que te estés perdiendo todo esto, porque serías el más disfrutón. Siento que no les hayas conocido y que no te hayan conocido a ti.
Sé que probablemente la vida contigo no habría sido
diferente, quizá sí… pero siempre habría sido mejor. Así que en cualquier silencio y sobre
todo barullo, en tranquila soledad o así de bien acompañada, aposta o sin
querer, sin ningún motivo y con todas las razones, siempre te tengo ahí. Haciéndome mejor. Haciéndonos mejores. Unos chicos excelentes...
Valeu, Pai. Parabéns. Até máis.
3 comentarios:
Eres genial pekeñitaaaa! Te quierooo
Mi peke!!!
Mi peke. Tqm!!!!
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